EL MÉTODO DE PALCHINSKY En su extraordinario libro ADAPT, Tim Hardford explica, usando historias fascinantes el éxito y el fracaso, de ...

EL MÉTODO DE PALCHINSKY

EL MÉTODO DE PALCHINSKY
En su extraordinario libro ADAPT, Tim Hardford explica, usando historias fascinantes el éxito y el fracaso, de modo que se desafían nuestros supuestos al respecto. Lean por ejemplo esto:
En la Rusia zarista, en 1901, el ingeniero de 26 años Pavel Palchinsky fue enviado a la rica zona minera de la cuenca del Don para estudiar las condiciones locales. Palchinsky descubrió que los mineros trabajaban en condiciones infrahumanas: 40 a 60 personas en cada habitación, donde tenían que arrastrarse para poder llegar al lugar donde dormir, con baños rudimentarios, mala comida y mala paga. 
Cuando Palchinsky envío su reporte, las autoridades lo consideraron dinamita política: fue enviado a Siberia. Para su fortuna, Palchinsky logró escapar a Europa. Allí conoció las nuevas industrias que se estaban desarrollando, la gerencia y la tecnología. Logró convertirse en un exitoso consultor industrial. 
Por increíble que parezca, Palchinsky comenzó a escribir consejos al propio gobierno zarista que lo había encarcelado respecto a cómo mejorar la economía. Por fin lo perdonaron en 1913, y fue consejero cercano del Zar. Cuando triunfaron los bolcheviques estuvo a punto de morir, pero logró sobrevivir y comenzó a trabajar con los comunistas. Hasta llegó a escribir una carta al Partido explicando que la tecnología y la ciencia eran más importantes que el comunismo. Habló contra los grandes proyectos soviéticos, y la importancia de dar a la gente más iniciativa. 
Es fácil olvidar cuán exitosa era la economía soviética en aquellos tiempos. Había muchas personas creativas en la URSS, y para 1950 muchos expertos consideraban que este sistema, si bien cruel y anti-democrático, era más efectivo que el capitalismo para conducir la economía. 
La falla soviética se reveló poco a poco en su incapacidad para experimentar. Negaron la variación repetida y el proceso de selección de las mejores ideas. No podían tolerar una variedad de enfoques a un problema ni podían decidir qué funcionaba bien y qué no. Todo el sistema era incapaz de adaptarse. 
Palchinsky, con su experiencia internacional y su inteligencia fue enviado a fines de 1920 a  supervisar dos de los proyectos estelares de Stalin, uno de ellos la Represa Lenin (la más grande del mundo en ese entonces). Por supuesto, escribió todos los problemas que tenía esta idea, que luego resultaron ser todos ciertos. Pero a Stalin eso no le interesaba, quería la presa más grande del mundo y ya. Lo mismo ocurrió con el otro proyecto (La Ciudad de la Montaña Magnética), que se suponía que iba a generar mas acero que todo el Reino Unido. 
Lo que Palchinsky comprendió fue que la mayoría de los problemas del mundo real son más complicados de lo que creemos. Su método se podría resumir en tres principios: 
  1. Buscar nuevas ideas e intentar nuevas cosas. 
  2. Al intentar algo nuevo, hacerlo en una escala tal que se pueda sobrevivir al fracaso. 
  3. Buscar retroalimentación y aprender de los errores. 
Una oscura noche de 1928, Palchinsky fue arrestado por la policía secreta y nunca más su esposa lo vio. Un año después se supo que había sido ejecutado sin juicio y sin explicaciones. Muchas décadas después se encontró el expediente: había sido acusado de sabotear la industria soviética al plantease "objetivos mínimos." Es decir, fue asesinado por descubrir qué podría funcionar y no callarse la boca cuando veía un problema. 
A fines de los años 80, hubo una revuelta decisiva entre los 250 mil mineros rusos, encabezada por los mineros de la cuenca del Don, que protestaban por las grotescas condiciones de trabajo en las que vivían, con una tasa de accidentes 20 veces más alta que sus equivalentes americanos. Gorbachov tuvo que aparecer en televisión, y reconocer que los mineros tenían razón. Sesenta años después de la ejecución de Palchinsky, y ochenta después que había señalado los problemas con las condiciones de vida de los mineros, el sistema soviético nunca pudo adaptarse.